Una performance del 2006. Pensaba que estas fotos ya estaban perdidas, pero no. Las encontré por ahí (fotolog). Estas capturas me las tomé en dos o tres días diferentes, creo. La verdad es que no recuerdo muy bien, pero por la ropa así parece ser. Lo que sí tengo claro es que salí con un amigo a la calle en una de esas ocasiones y los dos nos tomamos fotos por turnos con una cámara que compré con el dinero que había ahorrado en mi primer trabajo a contrato. No tengo las de él, sólo conservé estas. El disco duro donde tenía todo se perdió para siempre.
Este blog partió ese año y no es casualidad. Fue cuando decidí dedicarme al arte. Dejé la carrera de tecnología médica y entré al año siguiente en Arquitectura, porque pensaba que siendo arquitecto podría dedicarme a crear después. Y así seguí con mi vagabundaje.
Me pongo a revisar las entradas de este blog. Muchas me dan vergüenza y ganas de eliminarlas. Pero considero que si algo tiene de valioso este registro es justamente la ausencia de un filtro. Acá van a parar buena parte de las cosas que hago (no todas, porque tampoco me alcanza el tiempo -ni las ganas- para eso) y comenzar a eliminarlas sería quitarle el único valor y sentido que tiene este lugar que rara vez es visitado por alguien.
Igual le he quitado algunos escritos a las entradas, pero es porque en sí esas cosas no son tan importantes y lo que opine yo, como persona, no debería tener peso o llamar más la atención que las imágenes de lo que hago.
Igual le he quitado algunos escritos a las entradas, pero es porque en sí esas cosas no son tan importantes y lo que opine yo, como persona, no debería tener peso o llamar más la atención que las imágenes de lo que hago.
Muy posiblemente, este texto también lo borre más adelante. Quién sabe.
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